8 de octubre: Santa Pelagia de Antioquía, mártir
Fiel a Cristo hasta el supremo sacrificio
En el corazón del Imperio bizantino, un antiguo calendario litúrgico promulgado por el emperador Basilio II conserva los nombres de algunos mártires cristianos: entre ellos se encuentra Pelagia, junto a Domecio, Áquila —indicado como eparca— y Teodosio. Su memoria, custodiada en la tradición oriental, llegó también a Occidente a través del Martirologio Romano.
Estos cristianos vivieron durante el reinado de Juliano el Apóstata, el emperador que intentó por todos los medios restaurar el culto pagano, convencido de que ello detendría la decadencia del Imperio. En una ocasión pública celebrada en Cesarea, mientras se realizaban ritos en honor de las antiguas divinidades, Pelagia y sus compañeros se opusieron abiertamente, denunciando el engaño de aquella religión impuesta por la fuerza. Su firme testimonio los condujo al arresto, a la tortura y, finalmente, a la decapitación. Corría el año 362, doce meses antes de la muerte de Juliano, que habría de caer en combate contra los bárbaros.
